Su órgano había sido dañado en un accidente. Recibió otro de un joven de 22 años con muerte cerebral. A las dos semanas se lo extrajeron porque tanto él como su señora no aceptaron la situación.
Un grupo de cirujanos chinos realizó el "primer trasplante de pene del mundo" a un hombre cuyo órgano resultó dañado en un "accidente" durante este año, según se informó a toda la comunidad médica internacional.
Después del accidente que sufrió, este hombre quedó con un pene de apenas un centímetro, con el que "no podía orinar ni tener relaciones sexuales", y que le acarreaba graves trastornos psicológicos. "Su calidad de vida quedó gravemente afectada", explicó el doctor Weilie Hu, cirujano del Hospital General de Guangzhou.
Los médicos tardaron aproximadamente 15 horas en trasplantarle a este paciente, casado y de 44 años, un pene de 10 centímetros, luego que los padres de un joven de 22 años fallecido de muerte cerebral decidieron donar el órgano de su hijo.
Esta operación, descripta en un estudio que aparecerá el mes que viene en la publicación European Urology, representa un "impor tante paso adelante" en la cirugía de trasplantes.
Para conectar los nervios y pequeños vasos sanguíneos se debió practicar una "compleja microcirugía". El equipo médico que realizó esta operación calificó a la intervención como "todo un éxito".
Diez días después de la operación, los análisis realizados mostraron que el órgano trasplantado tenía ya un adecuado suministro de sangre y el paciente "pudo orinar normalmente".
Los médicos ya habían logrado en el pasado volver a unir un pene con el resto del cuerpo luego de un ataque o accidente, "pero esta operación en Guangzhou es la primera en la que el pene de un donante cadavérico fue implantado con éxito en el cuerpo de otro hombre".
A pesar de que la operación fue un éxito desde el punto de vista quirúrgico, los médicos debieron retirar el pene dos semanas después. El doctor Hu explicó que esta medida extrema se adoptó "a raíz de un grave trastorno psicológico sufrido en el receptor y en su esposa, el pene trasplantado debió ser extraído, lamentablemente".
Los análisis realizados mostraron que el órgano "no había sido rechazado por el organismo".
Jean-Michel Dubernard, el cirujano francés que realizó el primer trasplante de rostro en una mujer que había sido atacada por un perro, comentó que los factores psicológicos son un tema serio para muchos pacientes que reciben órganos de donantes.
"Las consecuencias psicológicas de los trasplantes de rostro y manos muestran que no es fácil utilizar y ver de forma permanente las manos de una persona muerta, y que tampoco resulta sencillo mirarse en el espejo y ver el rostro de alguien muerto ya", escribió Dubernard en una publicación.
"No cabe duda de que en el caso chino el fracaso en una etapa temprana fue psicológico en primer lugar. Tuvo mucho que ver la esposa del receptor y esto obliga a que uno se plantee muchas preguntas", agregó Dubernard.
Andrew George, especialista en trasplantes del Imperial College de Londres, observó: "Hacer un trasplante de pene no debiera ser más complejo. Pero a las sensaciones nerviosas les lleva su tiempo comenzar a funcionar y no está claro si el paciente iba a poder tener relaciones sexuales alguna vez. El tema es si está bien hacer un trasplante por lo que puede ser visto como razones estéticas."
Primer trasplante de pene en el mundo
