Dos días antes del primero de sus dos shows en el estadio de Vélez, Diego Torres fue nombrado Embajador de Buena Voluntad de UNICEF para Latinoamérica y el Caribe.

Según este organismo, el hijo de la popular actriz y cantante Lolita Torres "siempre apoyó iniciativas que promueven la paz, la solidaridad y el respeto de los derechos humanos".

"Es un honor y un placer que UNICEF haya puesto los ojos en mí para sumarme a una causa así", expresó Torres en una pequeña ceremonia en la sede de UNICEF, a la que asistieron su padre, sus hermanas y su novia, la modelo Débora Bello. "Espero no defraudar", agregó luego de que el conductor Julián Weich (también embajador de la buena voluntad para UNICEF) lo presentara.

"Querido Diego, bienvenido. Te vas a unir a nuestro equipo. Sé que vas andando y ojalá lleves esa luz de esperanza para que cada vez que un niño llore sepa que hay un mundo de luz. Te vamos a pedir que ayudes a abrir corazones", comentó la representante de UNICEF en Argentina Gladys Acosta Vargas.

Luego de que dos adolescentes (una argentina y un salvadoreño) leyeran sus peticiones, la pequeña sobrina del cantante le entregó una mochila con una pelota y el texto de la Convención de los Derechos del niño. "¿Este es el manual de cómo jugar al fútbol", ironizó él y luego recibió un pin de UNICEF en manos de su padre.

La última sorpresa de la noche la dio la colombiana Shakira, quien a través de un breve tape se dirigió al cantante: "Bienvenido al equipo de UNICEF", dijo. Ella, al igual que Robbie Williams y Ricky Martin o la actriz Susan Sarandon, entre otros, cumple la tarea que de ahora en más desarrollará Torres: emplear su fama para llamar la atención de todos sobre la necesidad de proteger a los chicos. "Al primero que convocaría para ayudar es a "Manu" Ginóbili (el basquetbolista). Por su don de gente", cerró el intérprete que llegó a cantarle a Juan Pablo II el tema Color esperanza.